EL AMARILLO EN DECORACIÓN

Buenos días, decolovers!

Estábamos revisando el calendario y nos hemos dado cuenta que ¡Prácticamente queda 1 mes para primavera! No se vosotros, pero en New Home estamos deseando sentir el calor del sol en nuestras mejillas, a volver a ver las calles llenas de flores de colores y, sobretodo, volver a sentir esa fantástica energía que nos da la primavera.
A menudo, el cambio de estación viene acompañado de cambios en casa, así que hoy queremos hablaros de la tendencia por excelencia de esta primavera verano y de algunos tips para que puedas introducirla en casa. Efectivamente, hoy hablamos del color amarillo y cómo podemos usarlo en la decoración del hogar.

Durante muchos años, el color amarillo se ha asociado, sobretodo en el ámbito artístico, con la mala suerte. Ha sido un color infravalorado y a menudo rechazado o poco utilizado. Pero nada más lejos de la realidad. En psicología del color, el amarillo es un color positivo, asociado a la alegría, el optimismo y la energía.
Además, es el color del Sol (el Dios del Sol) y por lo tanto también es el símbolo de cualidades como la fuerza, el dominio, la creatividad y la inteligencia.
¿A que empiezas a ver el color amarillo con otros ojos?
Como todos los colores, el amarillo también dispone de una extensa gama de tonalidades que van des de los tonos más apagados como los ocres y mostazas hasta los más intensos y vibrantes como el amarillo limón.

Aunque las tendencias nos traen tonos más vibrantes, vamos a repasar cómo podemos usar el amarillo en todas sus variantes.

¿TODOS LOS TONOS SE USAN DE LA MISMA MANERA?

La respuesta es NO. Obviamente, la decoración no es una ciencia exacta, así que para gustos colores. Aunque si tenemos que dar una respuesta genérica, no todos los tonos del amarillo se usan o deben usarse de la misma forma. Generalmente, desaconsejamos el uso de los tonos más intensos del amarillo, como el limón, en grandes superficies como paredes o mobiliario. Su tono tan vibrante, en grandes cantidades, puede resultar demasiado pesado para la vista y llegar a connotarnos sentimientos negativos.
Normalmente, reservamos las grandes superficies para los tonos ocre  y mostazas e introducimos el amarillo más intenso en los complementos como las cortinas, cojines, etc.



Cuando hablamos de tendencias cromáticas, el textil del hogar es una excelente herramienta para poder introducir los colores de moda en el hogar sin necesidad de realizar cambios arriesgados. Cojines, cortinas y pequeños accesorios son nuestros mejores aliados a la hora de introducir colores complementarios a nuestra decoración y, también, todo lo contrario, colores que rompan la armonía cromática de una habitación.

¿COMO COMBINAMOS EL AMARILLO?

Aunque de primeras pueda parecer todo lo contrario, el color amarillo es un color muy agradecido a la hora de combinarlo con otras tonalidades, ya que combina perfectamente con tonos claros y con tonos oscuros. 

El amarillo en sus variantes más apagadas, como el mostaza o el dorado, combina a la perfección con tonos oscuros como pueden ser la madera oscura, el gris e incluso el negro. Esta combinación de tonalidades nos ayudan a crear ambientes sofisticados, siendo el propio color amarillo el encargado de romper con la monocromía.
En cambio, el amarillo en sus variantes más intensas, como el amarillo limón, combina muy bien con las tonalidades claras, como los blancos y los tonos arena. En este caso, es el propio color el que nos ayuda a dar calidez y amplitud en nuestros espacios.

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